Apacible cadencia
Apacible cadencia de las tardes de oro
embelesa la senectud de los chopos,
allí donde el mirón con curiosidad se asoma
hacia los arcos de San Juan y el verde soto.
Tras las tapias de San Polo los rosales en flor
al sol se abren con ansia nueva,
cuando mengua la tarde un arrebol
el celaje enciende como una hoguera.