Un desasosiego

Un desasosiego el corazón me inunda,

triviales horas observo pasar,

de este bajo oficio que da la vida

¿podré algún día apearme y descansar?

 

Siento aquí correr suave una brisa

acariciante y reparadora, que invita a olvidar,

al lodazal de la vida, a la acritud de las horas

quizás ya nunca querré regresar.